Cuando decidimos reformar la casa, debemos tener en cuenta varios consejos y adoptar una serie de medidas que a la larga nos evitarán disgustos.
Consejos para afrontar las obras:
Toda obra implica molestias (ruidos, vibraciones, polvo…). Por lo tanto, la primera sugerencia es vivir en otro lado mientras éstas se realizan. Se consiguen dos cosas:
- Evitar la tensión propia de las obras y de los operarios.
- Dejar libertad a los profesionales para realizar su trabajo, imprimiendo mayor dinamismo a las faenas.
Si le resulta imposible trasladarse temporalmente, ármese de paciencia y evite presionar a los profesionales ante cualquier eventualidad. Un buen ambiente hará las obras más llevaderas.
Medidas preventivas en una comunidad de vecinos:
Si su vivienda forma parte de una comunidad, tenga en cuenta las molestias que ocasionará a sus vecinos. Ellos no tienen porqué sufrir las consecuencias de su reforma.
Por este motivo, conviene tomar las siguientes medidas preventivas:
- Avisar sobre las obras antes de su inicio
Mediante una comunicación escrita en la entrada del edificio o en un lugar habilitado, informa a los vecinos que vas a realizar reformas en tu vivienda (indicando fecha prevista de inicio y fin). Agradéceles su comprensión y pide disculpas por las molestias que les puedas ocasionar. Así nadie se sorprenderá cuando inicies la reforma y asumirán los inconvenientes (polvo, ruido, suciedad…) como algo normal. - Solicitar el permiso de obras
Informar puede no ser suficiente y, a veces nos encontramos con impedimentos por parte de algún vecino. Por ello, unos días antes de empezar la reforma es necesario solicitar el permiso de obras correspondientes al Ayuntamiento. Al gestionar la licencia, estaremos cumpliendo con todos los trámites legales necesarios.
En el caso de reformas interiores, será suficiente con una licencia de obras menores. Con ésta podremos realizar en el interior de la vivienda las reformas oportunas, siempre y cuando no pongan en riesgo la estructura del edificio, ni afecten a elementos de fachada. Tampoco podremos variar la estructura de los bajantes de agua, ya que impediríamos que los pisos superiores pudieran desaguar.
Si quisiéramos reformar alguno de estos aspectos, necesitaríamos una licencia de obras mayores. - Solicitar licencia para la retirada de escombros
Cuando la cantidad de escombros es muy grande, y dependiendo del ayuntamiento, puede ser necesario solicitar una licencia para la retirada de escombros. Entonces nos plantearemos la posibilidad de alquilar un contenedor para depositarlos. Esto conllevaría el pago de la tasa de ocupación de vía pública (en función del número de días). - Respetar el horario de descanso de los vecinos
Debemos evitar hacer ruidos antes de las 8 de la mañana, después de las 8 de la tarde y no permitir a los operarios dar golpes un sábado o domingo, ya que aunque tengamos permiso de obras, podemos ser denunciados. - Proteger elementos que puedan ser deteriorados
En los espacios comunes, debemos proteger los elementos susceptibles de ser deteriorados al bajar escombros o subir material. Así pues, forraremos el ascensor o las barandillas de la escalera para evitar rayadas.
La puerta de entrada de casa va a sufrir el paso constante de personas y materiales, así que también es recomendable forrarla. - Limpiar el espacio común todos los días
Para evitar quejas o problemas con los vecinos, recomendamos limpiar la escalera y ascensor todos los días de trabajo, una vez terminan los profesionales.
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